Casi nunca he utilizado mi blog para hablar de fútbol, o de cualquier otro deporte. De hecho, creo que sólo lo he hecho una vez, pero no para hablar del fútbol en sí, sino para elogiar el enorme esfuerzo que hizo el defensa del FC Barcelona Éric Abidal en su recuperación después de ser operado por un tumor en el hígado. Ese esfuerzo, recalco ahora, lo llevó a ser el primero en levantar la copa de la Liga de Campeones de Europa el pasado mayo. Pero eso no viene al caso ahora.
Decía entonces que no suelo escribir sobre fútbol. Pero hoy de verdad me dieron ganas de hacerlo. Supongo que ya se imaginarán la razón...sí, el Clásico del fútbol español que se jugará el próximo sábado 10 de diciembre. Los que me conocen sabrán que soy del Barça hasta lo más profundo del alma; por eso, en esta entrada analizaré el partido desde un punto de vista culé.
En primer lugar, he de decir que, desde mi punto de vista, este será el Clásico más emocionante (y el mejor futbolísticamente) de los últimos años. De la historia quizá. Y eso que la temporada pasada hubieron cuatro en menos de 20 días. El sábado, los dos equipos llegan en un nivel sin precedentes. Cada uno tiene un estilo propio y totalmente distinto; ambos tienen excelentes jugadores y unos entrenadores sobresalientes (aunque Mourinho como persona sea para mí un asco, debo admitir que sabe de fútbol). Hay quienes dicen que, tras la racha positiva, el Madrid finalmente está por encima del Barça y que logrará romper con su hegemonía. Yo, por supuesto, no creo eso en absoluto. El espíritu del Barça, el impecable juego que practica cuando disputa un partido importante, la manera en la que lucharán jugadores que llevan toda su vida en el club (mientras que la mayoría de la plantilla del Madrid no tiene ni cinco años en el club)...todo esto le servirá al Barça para dar un excelente partido.
Por otro lado, el resultado de este partido dará una increíble ventaja anímica al vencedor. El Madrid, de salir victorioso, se colocaría a 9 puntos (a 6 en la práctica, pero el Barça lleva un partido más, así que de hecho serían 9). En la era Guardiola, si no me equivoco, eso nunca ha sucedido. Llevar esa diferencia les otorgaría el empuje necesario para cerrar la primera fase de la temporada con broche de oro. Sin embargo, si el Barça logra la victoria, empataría al Madrid en puntos (a la espera de la jornada faltante). Les daría la sensación de que una "remontada" liguera es posible. Además, los impulsaría mentalmente para la disputa de otro título: el Mundial de Clubes. Concluir la primera etapa de la temporada así, con un triunfo sobre el eterno rival y (siendo muy optimistas, y con todo respeto para los otros rivales) con el escudo del mejor equipo del mundo estampado sobre el pecho, le allanaría al Barça el camino que aún queda por recorrer.
El partido estará condicionado por el planteamiento de Mourinho. Si opta por su "trivote" defensivo, por encerrarse atrás como lo hizo con el Inter hace unos años, el resultado dependerá de la suerte, o de quién se equivoca y quién aprovecha ese error. Sin embargo, si decide hacerlo como en la Supercopa, agresivo, presionando desde muy arriba, será un partidazo. Los dos equipos más poderosos del momento lucharán con todas sus armas y entonarán una oda al fútbol plagada de elegantes fintas, soberbios toques de balón y potentes tiros al arco que cimbrarán los cimientos del Santiago Bernabéu. Espero que así sea. Por el bien del fútbol.
Concluyo esta entrada dando el once titular del Barça que alinearía ante el Madrid: Valdés; Alves, Puyol, Piqué y Abidal; Xavi, Busquets e Iniesta; Cesc como falso nueve; Messi como extremo por la derecha; por la izquierda, mi única duda. Creo que elegiría a Pedro. Confío en que Pep sabrá lo que es mejor.
Con perdón para mis lectores madridistas...visca el Barça avui i sempre!
Decía entonces que no suelo escribir sobre fútbol. Pero hoy de verdad me dieron ganas de hacerlo. Supongo que ya se imaginarán la razón...sí, el Clásico del fútbol español que se jugará el próximo sábado 10 de diciembre. Los que me conocen sabrán que soy del Barça hasta lo más profundo del alma; por eso, en esta entrada analizaré el partido desde un punto de vista culé.
En primer lugar, he de decir que, desde mi punto de vista, este será el Clásico más emocionante (y el mejor futbolísticamente) de los últimos años. De la historia quizá. Y eso que la temporada pasada hubieron cuatro en menos de 20 días. El sábado, los dos equipos llegan en un nivel sin precedentes. Cada uno tiene un estilo propio y totalmente distinto; ambos tienen excelentes jugadores y unos entrenadores sobresalientes (aunque Mourinho como persona sea para mí un asco, debo admitir que sabe de fútbol). Hay quienes dicen que, tras la racha positiva, el Madrid finalmente está por encima del Barça y que logrará romper con su hegemonía. Yo, por supuesto, no creo eso en absoluto. El espíritu del Barça, el impecable juego que practica cuando disputa un partido importante, la manera en la que lucharán jugadores que llevan toda su vida en el club (mientras que la mayoría de la plantilla del Madrid no tiene ni cinco años en el club)...todo esto le servirá al Barça para dar un excelente partido.
Por otro lado, el resultado de este partido dará una increíble ventaja anímica al vencedor. El Madrid, de salir victorioso, se colocaría a 9 puntos (a 6 en la práctica, pero el Barça lleva un partido más, así que de hecho serían 9). En la era Guardiola, si no me equivoco, eso nunca ha sucedido. Llevar esa diferencia les otorgaría el empuje necesario para cerrar la primera fase de la temporada con broche de oro. Sin embargo, si el Barça logra la victoria, empataría al Madrid en puntos (a la espera de la jornada faltante). Les daría la sensación de que una "remontada" liguera es posible. Además, los impulsaría mentalmente para la disputa de otro título: el Mundial de Clubes. Concluir la primera etapa de la temporada así, con un triunfo sobre el eterno rival y (siendo muy optimistas, y con todo respeto para los otros rivales) con el escudo del mejor equipo del mundo estampado sobre el pecho, le allanaría al Barça el camino que aún queda por recorrer.
El partido estará condicionado por el planteamiento de Mourinho. Si opta por su "trivote" defensivo, por encerrarse atrás como lo hizo con el Inter hace unos años, el resultado dependerá de la suerte, o de quién se equivoca y quién aprovecha ese error. Sin embargo, si decide hacerlo como en la Supercopa, agresivo, presionando desde muy arriba, será un partidazo. Los dos equipos más poderosos del momento lucharán con todas sus armas y entonarán una oda al fútbol plagada de elegantes fintas, soberbios toques de balón y potentes tiros al arco que cimbrarán los cimientos del Santiago Bernabéu. Espero que así sea. Por el bien del fútbol.
Concluyo esta entrada dando el once titular del Barça que alinearía ante el Madrid: Valdés; Alves, Puyol, Piqué y Abidal; Xavi, Busquets e Iniesta; Cesc como falso nueve; Messi como extremo por la derecha; por la izquierda, mi única duda. Creo que elegiría a Pedro. Confío en que Pep sabrá lo que es mejor.
Con perdón para mis lectores madridistas...visca el Barça avui i sempre!
muy buena entrada VISCA EL BARÇA un fuerte abrazo san ya casi nos vemos lastimas que no veremos el clasico juntos
ResponderEliminarLo sé, Joan, pero bueno, cuando llegues ya festejaremos. Igual un abrazo, y visca el Barça!
ResponderEliminar¿Que opinas acerca de la venta de David Villa por parte del Barcelona? Yo creo que es un excelente jugador y goleador pero no juega en su posición.
ResponderEliminarGuardiola mencionó hoy en su rueda de prensa que "MARCA miente", y si Guardiola lo dice, yo creo que es verdad. Creo que Villa no está en venta. Es un excelente jugador que ha servido muy bien en el Barça y le ha ayudado mucho. Si ha llegado a ser suplente, no es porque le falte calidad, sino porque el calendario exige rotaciones y porque la versatilidad es una característica muy importante de este Barça. En toda la temporada, no ha habido ningún once titular exactamente igual. Creo que Villa se quedará en el Barça al menos un par de años más.
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